La aventura fue un tanto extraña, sin planificación, sin medios, a la brava” como nos gusta a este club, a lo gambitero”….
La historia fue más menos así:
Nos habíamos juntado para cenar la mayoría de miembros en el restaurante” Kresala, sito en Vía Pignatelli (Torrero), con motivo de la entrega de las invitaciones de boda por parte de Isabel y Ruiz.
A mitad del evento se comento que al día siguiente se celebraban estas carreras e Iván disponía de un par de entradas gratuitas, además de la posibilidad de imprimir más por Internet, la gente se fue rajando y finalmente quedamos tres para ir a las eight a.m. Iván, David Campos y David H.
Nos despedimos, cada uno para su casa y en esto que Iván y David H. empiezan a pensar que quizás haya mucho tráfico por la mañana, que habrá atasco, que habría que quedar antes, que ya verás como saldremos más tarde,…y en ese momento surgió la idea por parte de Iván:
-Oye, que si quieres nos vamos ya y dormimos en el coche.
-No jodas, y que hacemos allí cuando lleguemos.
-No dicen que hay una zona de acampada y montan carpas x la noche?
-Si, eso he odio yo, pero…qué hacemos con este? (por David Campos)
-Llámalo, a ver que opina
-Ring, ring, ring…qué pasa??
-Oye, que estoy hablando con Iván que como mañana habrá mucho trafico y nos costara llegar. ¿Por qué no nos vamos ya, dormimos allí, que algo habrá, en plan aventura?
-OK (sin dudar ni una décima de segundo, que raro, no??), cojo la tienda de campaña y pasadme a buscar en media hora.
Y así es como se organizo la excursión, cada uno a su casa a coger algo de ropa, la nevera, hielo, cerveza y pa’Alcañiz a la 1 de la mañana, buen horario.
Por el camino, íbamos hablando sobre qué nos encontraríamos, por todo el mundo es sabido que en estos circuitos hay mucho ambiente, la gente va de acampada varios días, vamos que pinta bien la cosa y como debutamos todos, nos picaba la curiosidad por ver las carpas que montan con la música, las barras, full equipe” vamos…
En esto que ya vemos el desvío del circuito y conforme nos acercamos y pasamos varias rotondas, no escuchamos el griterío de la gente, ningún haz de luz de focos, nada de jaleo, qué raro -nos decíamos unos a otros.
Y por fin llego el momento clímax de la noche, llegamos a la garita de control, sale un segurata y la conversación:
-Hola buenas, a la zona de acampada por donde se va??.
-Zona de acampada?. Si aquí no hay.
-Como que no hay, no montan zona de acampada cuando hay carreras?
-Si, pero solo el fin de semana de moto GP.
-No jodas…Pues es que hemos venido de propio a esta hora (3:30 a.m.) porque pensábamos que mañana habría mucho atasco y habíamos decidido dormir en la zona de acampada
En este momento intentad imaginad el careto del segurata y el bajón que nos pego a los tres. Tremendo…!!!!
-Ya os digo que no hay -volvió a repetir-
-Lo único que se me ocurre es que pongáis la tienda en algún ribazo que veáis y hasta mañana. Podéis ir a una zona que hay pasando la rotonda anterior, girando a la izquierda, cogéis luego la tercera y cuando lleguéis a…..bueno esperad, que cojo el Patrol y me seguís porque con lo oscuro que está no lo encontraréis.
Seguimos al Patrol y tras comprobar que en la vida lo habríamos encontrado nosotros solos, para en mitad de la carretera, a la altura de un desvío de tierra.
-Meteros con el coche por este camino y a unos 300 metros veréis a la izquierda una zona llana para montar la tienda, poneros detrás de la roca, no sea que pase la Guardia Civil y os multe, que no se puede hacer esto.
Lo que nos faltaba -pensamos todos-
Y tras dar las gracias al buen samaritano y ofrecerle Julen como cinco seis veces cerveza, nuestro ángel de la guarda nos dejo solo.
Llegamos a la zona, aparcamos y decidimos tomar una cerveza fresquita de la nevera mientras comentábamos lo pardillos que habíamos sido por no informarnos antes, e ir a lo gambitero”
Al rato empieza la instalación del aposento.
Spherical one: la tienda
Round two: el colchon de aire
Lo sacamos, estiramos, cogemos el inflador, lo introducimos en el agujero del colchón, le damos al botoncito de encendido,…y ¿qué creéis que paso?. Correcto, no funcionaba.
-Julen, has cargado el inflador?
-Einggg….??Es que hay que cargarlo? Yo es la primera vez que lo uso y no tenía ni idea.
Por suerte, en la caja venia un cargador de mechero de coche para cargar el inflador, lo malo es que en las instrucciones ponía que tardaba varias horas en cargarse.
Decidimos tomarnos unas cervezas y unos wiskis mientras se cargaba, pasado un rato probamos el inflador y sale aire, todo solucionado.
Introducimos de nuevo el pitorrico del inflador en el agujerito del colchón, le damos al botoncito y milagro!!! Se empieza a inflar.
-Julen, pásame el tapón del colchón.
-Tapón?? En la bolsa solo estaba el colchón , no hay tapón.
-Comorrr…que no hay tapón??Como lo has podido inflar y que no se salga el aire otras veces??
-Lo compré hace unos años y es la primera vez que lo uso, no sé.
Spherical three: tapar el colchon con algo para que no salga el aire.
-Y ahora que hacemos. -nos preguntábamos todos.
-Voy a probar con el tapón de la linterna que tengo en el maletero del coche.
-Si hombre Iván, como que va a encajar.
Que creéis que paso….QUE ENCAJABA… fue un momento increíble, no nos lo creíamos, encajaba muy bien, aunque al levantarnos al día siguiente estaba casi deshinchado, había aguantado el aire más de lo esperado. Fue el primer y único momento de suerte de la noche.
Finalmente y tras unas cosas y otras sobre las 5,30 de la mañana nos echamos a dormir, hacía bastante frío y sucedió lo que estaba previsto. David Campos se durmió el primero, se puso a roncar y el resto del grupo a contar las rayas del techo…mala suerte, no se puede luchar contra las fuerzas de la naturaleza, jejeje…
A las eight nos despertamos, mejor dicho, se despierta ropa senderismo el único que durmió, recogemos y nos vamos al circuito.
Una vez allí, vemos alguna carrera, y nos metemos en la zona de entretenimiento, vemos coches de exposición, simuladores e incluso Julen realizo un cambio de ruedas como podéis ver en este video.
Se va llenando de gente, comemos un bocata para desayunar y vamos pasando el día disfrutando del ambiente, incluso abrieron el paddock una hora para la gente, fotos de rigor y una vez que nos damos por satisfechos de vuelta a Zaragoza.
En resumen, una muy buena aventura donde todo salió al revés, y por esto mismo nos hace recordarla como muy bonita, especial y lo que nos reímos cada vez que la contamos.
Gracias a todos por participar.
LA ORGANIZACIÓN.