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Ya entramos en la cuenta regresiva , este lunes 20 de Enero estamos saliendo desde la ciudad de Colón provincia de Buenos Aires. Tenemos como primera parada la ciudad de Río Cuarto, Córdoba, Argentina. Algo de 300 km en el primer día como para ir arrancando. Alrededor de más de 20.000 km de viaje a lo largo de todo un año aproximadamente. Estamos cerrando los últimos detalles, la mezcla de emociones se empiezan a sentir cada vez más fuerte”…
Terminaba de escribirlo y ya la inquietud formaba parte de nuestra masa. Materia y energía, al cien por ciento.
Contábamos con dos mochilas repletas de cosas básicas y necesarias para todo un largo viaje, 20 kg para mi espalda, con todo lo justo (aunque eso nunca suele ser verdad) y unos 14 Kilos en whole para mi compañera Sofia. Dos mochilas pequeñas de mano para uso auxiliar y una guitarra criolla como fiel compañera en momentos de plenitud.
Listas, completas. Dìa 1, preparaciòn ultimate
Como bendecidos por el destino ese día llegamos en el auto de mi hermano hasta el pequeño pueblo de Hughes, Santa Fè, el primer dedo llego con el mejor impulso, no màs de 15 minutos de espera bastaron para que una pareja en una camioneta nos lleve directo a nuestro primer ropa de mujer deportiva objetivo, Rió cuarto, Córdoba. Ahí nos esperaba nuestro amigo Franco, hacia un año y pocos días atrás lo conocí en mi primer viaje. Fue la entrada al mundo CouchSurfing y el primer rompe-hielo con lo desconocido que me toco enfrentar, de hecho una hermosa experiencia.
Tres, cuatro días de conversaciones, caminatas y hasta breves presencias de tormentas bien fuertes, pero de esas que hacen temblar todo un edificio y volar chapas de techos, sin exagerar demasiado. Ciudad de temblores y tormentas bien extremas se dice.
Se estaba formando la tormenta en Rio cuarto…
Se viene el estallido…
Plaza principal de la ciudad
Córdoba nos alojo muy bien, el dedo salia de lo mejor, menos de 20 minutos de espera period el tiempo promedio en cada salida. Las rutas se hacían respetar, ese verano pasado el calor sofocante hacia presencia constantemente. La temperatura y el asfalto caliente nunca se ausentaban.
De nuestra segunda tirada llegamos al pueblo de Achiras, Còrdoba, donde estuvimos solo unas horas de pasada e hicimos la primera noche al aire libre en carpa sobre un cómodo espacio con parrillas publicas y arboles generosos de sombra.
Ese día no vimos al sol, se escondió como si no lo fuéramos a conocer, el día estaba muy nublado y parecía que se estaba por caer el cielo en mil pedazos. También presenciamos los primeros atascos” en las rutas, donde por arte de magia pasamos de materia visible a no visible en cuestión de segundos. Asì era viajar a dedo. Ese choque con lo incierto, con lo no predecible. Cero segundos eternas horas en tiempo period lo que costaba el pasaje al próximo destino. Era enfrentarse a un nuevo camino desconocido y novedoso constantemente.
De apoco empezamos a entrar en clima viaje”, nos estábamos adaptando. Entrabamos al nomadismo. Se trataba de aprender a estar en movimiento, después de varios meses estables y surtidos entre horas libres, estudios, jornadas laborales bien estresantes y con el tiempo contado a reloj, horas, días, meses. Amoldados al calendario. Contacto, espacios y momentos compartidos con nuestra gente se sumaban a la vida.
Ya habían quedado atrás todos esos meses pasados después de llegar de un breve viaje en otro año lleno de recuerdos. Tres meses y medios de inicio al mundo caminante. Argentina, Bolivia y Perù como primera presentación de la carta Latina.
Las ultimas semanas del 2013 fueron exclusivamente estados de transición, planificación, adaptación y cambios. Siempre para bien, siempre positivos.
Los primeros días en ruta fueron esenciales para acomodar nuestras ideas y seguir para delante. Todo logro tiene su esfuerzo, nada llega de arriba. Viajar a dedo nos hizo ver otra forma de transportarnos a través del contacto humano, de la generosidad.
Al avanzar kilómetros por kilómetros, se nos fueron presentando las hermosas provincias de San Luis, Mendoza y San Juan, las primeras en el tramo horizontal por las rutas Argentinas. Por esos días escribíamos en las redes sociales los primeros relatos de lo que mas adelante formarían parte de varios escritos en el weblog ;
Desde hace tres días nos encontramos en el pequeño pueblo de Potrero de los Funes a 15 km de la capital de San Luis. Llegamos con un dedo directo desde Santa Rosa, one hundred eighty km de un solo tirón.
Acá hay Wi-Fi gratis en toda la provincia, pero si hay mucha demanda se cae el sistema. Estamos alojados en la casa de Seba, desde hace unos días venimos siendo testigos de sus buenas manos en la cocina
Nuestra idea por ahora es bajar hasta Mendoza y de ahí ir subiendo por la cordillera del lado argentino, pasando por San Juan y La Rioja. Ayer fue nuestra primera semana de viaje, de nuevas experiencias y buenos momentos.”
Escalando en San Luis.
Relatos, escritos y algunas imágenes para compartir. Eso es lo que también forma parte del proyecto. Amigos del camino, personas que se nos presentan en las rutas. Gente que nos abren las puertas de su casa, comparten una risa, un dialogo y un presente. Brindan con hospitalidad.
Cambios de planes, rutas y lugares nuevos,desconocidos, era ya de lo màs regular para nosotros. Nunca nada netamente fijo. Siempre aparecen alternativas ideas nuevas.
” Nos encontramos en Tunuyàn, Mendoza. Estuvimos varios días en Valle Grande, sin señal ni batería del celular, desconectados por completo. Acampamos y pasamos hermosos momentos con gente muy buena onda, compartiendo mucha música, fuego y comidas a las brasas. Por suerte no llovió nunca y los días nos acompañaron, siempre brillo el sol. Nos costaba bastante irnos de ahí. Recién llegamos a este pueblo, se nos complicó un poco el dedo pero después de varias horas nos levantaron, hicimos unos a hundred and twenty kilómetros. Tenemos pensado estar por acá unos días conociendo el lugar, viendo que nos espera de nuevo. Nuestra thought para las semanas que siguen es ir subiendo hasta la Cordillera de los Andes, por el lado de Mendoza, para después entrar a San Juan y La Rioja.”
Se lucia Mendoza. Plantaciones de parras por doquiera, la provincia de los vinos, de los copos nevados, de unos paisajes y ríos alucinantes. Gente nueva, lugares nuevos.
Llegamos a Uspallata, Mendoza !. Estamos a one hundred km de la frontera con Chile, pero por algunas cuestiones seguimos subiendo por Argentina hasta llegar a Bolivia. Pasamos por Tunuyàn y de ahí fuimos al Manzano Histórico, donde San Martín pasó a descansar luego de independizar a Chile, esos son los rumores y el tinte turístico que le dan al lugar.
Nos encontramos armando nuestros emprendimientos de fotografía y macramé que fuimos aprendiendo estas últimas semanas. Estamos organizando nuestros primeros recursos para generar dinero de forma independiente y que nos permita seguir viajando a lo largo de todo el año.
Ayer nos levantó una pareja rumbo al pequeño pueblo de Potrerillos, Mendoza, donde sin esperarlo terminamos escalando por primera vez. Estaremos descansando unos días, trataremos de pasar por el Aconcagua y el famoso puente del Inca, según nos contaron sus aguas abundan en minerales haciendo que todo lo que toque quede petrificado de un colour dorado, ademas nos comentaron de unas comunidades espirituales muy interesantes que viven en la zona, ojalá podamos ubicar alguna de éstas para interiorizarnos màs en el tema”.
Vista mañanera. Vallegrande, Mendoza, Arg.
Se pasaba el tiempo y ya pocas horas de luz nos quedaban para seguir avanzando, nadie nos levantaba y el dedo se hacia esperar muchísimo. Cerca de las cinco de la tarde el calor y el sol seguían pegando muy fuerte, como fortuna en el aire frena inesperadamente Jorge con su compañera Flavia. Nuestro pequeño cartel lograba su resultado. A los minutos que siguieron entramos en confianza, contándoles de donde veníamos y que andábamos haciendo por ahí, a su vez ellos nos narraban su historia. Venían de San Luis Capital para llegar hasta Potrerillos, donde allí en un terreno sobre una zona muy tranquila se estaban construyendo su casa. Ese hogar que tanto desearon durante años y finalmente se les estaba haciendo realidad.
En el camino, vehículo en marcha, nos preguntan si gustábamos de acompañarlos a escalar, a pocos kilómetros desde donde estábamos. Obviamente respondimos con un si” de nene con juguete nuevo, a los pocos minutos llegamos al lugar, estacionamos el auto y llevamos los bolsos con los equipos, tras caminar unos pocos metros sobre unas vías de tren abandonadas nos topamos con varios paredones de roca solida, frente al rió que por debajo no dejaba de correr. Una corriente de forma brusca, nada de movimientos leves, le daban un toque especial a la situación.
El primer paredón period como una prueba piloto, cerca de 15 metros de altura con una forma levemente empinada estaba frente a nuestros ojos. Sin pedir permiso nos invitaba a la apertura del juego. Luego de subir todos con éxito se venia el segundo con mas dificultad, cerca del doble de diámetro y acompañado con la caída del sol, lo mirábamos de reojos. Era otro nivel, mas alto y empinado, pero no podía echarlo de menos. Jorge se calzo el arnés y lo enfrento como si lo conociera de toda la vida. Sin problemas bajo y me miro ofreciéndome el turno.
La segunda, sin dificultades al principio y a fuerza de loco sin despegarme un segundo en cada pisada llegue a la cima y con un pequeño impulso hacia atrás con breves flexiones de piernas volví a bajar. Ese fue un día especial, nos despedimos con las mejores sonrisas y abrazos de satisfacción. Pasamos la noche acampando sobre un espacio verde nocturno. El combo cansancio-tranquilidad-sueño venían de primera mano.
Pasamos los días siguientes visitando la famosa montaña -Aconcagua- ubicada íntegramente en la provincia de Mendoza, en el oeste de Argentina. Integra un sistema geográfico paralelo a la cordillera principal, la cual es un componente de la cordillera de los Andes. Con una altitud de 6960,8 msnm es el pico más elevado de los hemisferios sur y occidental, una de las mas altas del mundo.
Acampando en Uspallata sobre un fantástico espacio verde. De vista al fondo un horizonte montañoso de otro mundo.
Uspallata, Mendoza.
De fondo el cerro Aconcagua, el màs alto del mundo. Mendoza, Argentina.
Hacia falta nombrar también a la pintura natural no reconocida por Salvador Dalì, el puente del Inca. Una formación rocosa que forma un puente natural sobre el rìo Las Cuevas”. Está curiosa geoforma unida a un abandonado lodge de baños termales lo han convertido en un punto turístico destacado, actualmente considerado un área pure protegida.
-Dista unos 183 km de la Ciudad de Mendoza capital por la ruta 7, cerca del paso a Chile y de la entrada principal al Parque provincial Aconcagua.
Puente del Inca, camino al Aconagua,
Allí mismo, se construyo en 1925 el Hotel Puente del Inca, bien Europeo. En 1965 los frecuentes aludes, que un tiempo antes habían dejado inhabilitado el servicio del tren trasandino, destruyeron totalmente el resort, salvándose sólo la pequeña capilla colonial, en donde provisoriamente se instaló el private y los visitantes.
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