El pasado mes, y como es ordinary en nosotros de vez en cuando hacemos alguna escapada a la montaña. Esta vez sin nuestros queridísimos perros. El lugar requería de mucha seguridad respecto hacia ellos. Así que decidimos ser conscientes y dejarlos en casa. Más vale volver y que ellos estén ahí esperándote que volver sin alguno de ellos.
Así pues, nos esperaban unos 165km, 1 hora i 56 minutos aproximadamente.
Una vez allí, aparcamos el coche al lado de la carretera. Obviamente no íbamos a pagar el parking que había pudiendo dejar el coche al lado de este, cabe destacar que tampoco había nadie allí para cobrarnos, el puesto estaba cerrado.
Emprendemos la marcha, nos esperan unas 6 horas de ruta aproximadamente. Hay alguna que otra caravana, pero deben estar durmiendo. Todo está desierto, no se ve nadie. Apenas nos cruzamos con otra pareja pero pronto los dejamos atrás.
Todo es precioso. El paisaje es asombroso. Las montañas, el agua, el silencio…
Llegamos al primer puente de los dos que teníamos que atravesar. Con pies de plomo pisamos la plataforma y comenzamos a atravesarla. ¡OJO! Como se mueve. ¿Esto será seguro? Esperemos que si… nos pegaríamos un buen baño si cayéramos.
Ahora el recorrido empieza a ser cada vez más dificultoso. Terreno pedregoso y con un desnivel positivo importante. Una vez arriba toca bajar y, nada más y nada menos que por unas escaleras de madera enganchadas en todo el lateral de la montaña. ¡No apto para personas con vértigo!
Volvemos a atravesar otro puente. ¡Este se mueve más que el anterior! ¡Ay!
Segunda pared de escaleras de madera pero, esta vez de subida. Como cambia hacer las escaleras bajando a hacerlas subiendo. Impresiona mucho más bajarlas porque bajo tus pies ves los metros de altura que te separan del suelo.
Ya hemos llegado al refugio. Toca almorzar. Pero ya que estamos aquí 10minutos más no se notaran. Nos habían comentado que una vez ahí podíamos subir a una ermita y que las vistas serian espectalures. Y si, valió la pena.
Media vuelta que ya hemos acabado. Cabe destacar que a la vuelta había tramos que parecía La Rambla de Barcelona de la cantidad de gente que había. Así como el principio de la ruta fue bastante tranquilo porque no encontramos a prácticamente nadie, la vuelta fue algo pesada al tener que reducir el ritmo.
Hasta aquí una de nuestras muchas aventuras juntos.
Hoy cumplo 4 meses, es mi CumpleMes”.
Mis hermanitos y mis papás me han hecho una fiesta, y me han llevado de excursión a una cascadita.
No me había bañado nunca en una poza como esa. Mis papás se divertían tirándose por la cascada mientras que mis hermanitos y yo nos bañábamos.
– DANKO –
Apasionados del deporte. El correr, el caminar, el descubrir lugares nuevos, lugares mágicos. Montserrat es una de nuestras montañas de siempre. La de casa. La que cada vez que la visitas encuentras algo nuevo. La que enamora por su peculiar morfologia.
(Sant Jeroni, ropa senderismo Montserrat)
(Montserrat desde el aire)
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